domingo, 19 de febrero de 2012

REconocerse (III)


Ponte de pie. 

Sí. Así diréctamente, sin introducción ni nada... hoy mejor SENTIR sin explicar. Después tendremos tiempo para eso. 

Antes de seguir, necesitarás una pelota, más o menos del tamaño de una mandarina (si es un pelín más pequeña, mejor) y que no sea excesivamente dura.



¿La tienes? Bien, ahora sí.

Ponte de pie. Descalzo sobre el suelo. Con los pies ligeramente separados. 

Cierra los ojos. Respira un par de veces profundamente. Siente tus pies apoyados sobre el suelo.

Coloca la pelota bajo tu pie derecho. Deja caer todo el peso de tu pie sobre la pelota, como si no estuviese.

Cierra los ojos. 


Imagina que la pelota está impregnada de pintura (de esta de dedos que huele tan bien, por ejemplo) del color que tu quieras. Ahora, ve deslizando la pelota por la planta de tu pie, imaginando que vas pintando según haces los pases. (Sujétate levemente a una mesa o silla si ves que pierdes el equilibrio)


"Pintas" TODA la planta del pie. Desde los dedos, hasta el talón, por el borde externo e interno, por el centro del pie...  Si sientes molestia en algún punto no lo presiones directamente. Ve rodeándolo, acercándote poco a poco cuando veas que va cediendo. Tómate tu tiempo, despacio, haz líneas, círculos, sin levantar los dedos hacia arriba. Deja que tu piel y tus músculos se adapten al paso de la pelota.

Cuando creas que has "pintado" toda la planta del pie, saca la pelota y vuelve a plantar el pie en el suelo.

Con los ojos aún cerrados, SIENTE.

Compara la sensación que tienes en tu pie derecho con la que tienes el izquierdo (Tómate tu tiempo)

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Compara la sensación que tienes en tu pierna derecha con la que tienes en la izquierda.

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La sensación que tienes en la mitad derecha de tu cuerpo con la que tienes en la mitad izquierda.

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Por último, flexiona tu cuerpo hacia delante, como si quisieras tocar el suelo pero sin forzar, dejando caer el cuerpo y los brazos hacia delante y hacia abajo. ¿Tienes la misma sensación en los dos lados de tu cuerpo al flexionar? ¿La misma facilidad? ¿Hay la misma distancia entre cada una de las manos y el suelo?

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¡Muy bien! Pues acabas de REconocer el lado derecho de tu cuerpo, es decir, has tomado conciencia de tu pie derecho y sin darte cuenta, de todo tu lado derecho. Esa sensación está siempre ahí, pero hoy la has REconocido, es decir, la has hecho más consciente. Has reforzado esa imagen corporal en tu corteza cerebral. Has hecho una pequeña contribución a la mejora de la representación mental de tu cuerpo y sólo esa acción consciente ha provocado ciertos cambios, que probablemente se reflejan en sensaciones más agradables, más ligereza, más apoyo, más equilibrio...

Mejorar nuestra imagen mental, la representación cortical (cerebral) de nuestro cuerpo, es importante para una mejor vivencia de nuestro propio cuerpo. Es una herramienta valiosísima para la prevención y el tratamiento de numerosas patologías, entre ellas el DOLOR CRONICO (pincha aquí para más info).

¿Quieres REconocer ahora tu parte izquierda? ¡Perfecto! Por hoy ya no te cuento más, te dejo con tus sensaciones. Haz la experiencia con el pie izquierdo. Y si quieres, después, nos lo cuentas. (Indirecta para que te animes a compartir tu experiencia en los comentarios ;))

Nota.: Esta experiencia está inspirada en las "premociones" de "El cuerpo tiene sus razones", de Thérèse Bertherat. Ed. Paidos Ibérica. 2006. 

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